Moral Reforma
La Zona Arqueológica Moral-Reforma es un sitio maya del período clásico. Se encuentra en el municipio de Balancán, en el estado mexicano de Tabasco, sobre las llanuras inundables del río San Pedro Mártir, cerca de su desembocadura en el río Usumacinta. Se ubica 15 km al poniente de la villa El Triunfo, 20 km al oriente de la ciudad de Balancán de Domínguez y 35 km al noreste de la ciudad de Tenosique de Pino Suárez.
Esta zona arqueológica pertenece al grupo de ciudades de la cuenca del Usumacinta, al igual que Pomoná, San Claudio, Palenque, Bonampak, Yaxchilán y Piedras Negras. Guarda similitud con Tikal, en Guatemala, y con Río Bec, en Campeche.
La ciudad maya bautizada como Moral-Reforma fue un puerto fluvial que tuvo su esplendor alrededor del 600 d. C. El sitio arqueológico, ubicado junto a la comunidad rural de Reforma, tiene una extensión de 87 hectáreas y al menos 30 montículos, algunos de ellos de grandes dimensiones, que probablemente cubran pirámides de importante tamaño.
La primera mención del lugar data del año 1907 y corresponde a quien se considera descubridor del sitio, Teobert Maler. A finales de 1930, E. Willys Andrews IV descubrió la estela 1, en 1945 las estelas 2 y 3 fueron descubiertas por el arqueólogo mexicano Raúl Pavón Abreu. Desde 1992, el INAH lleva a cabo las excavaciones y trabajos de restauración en los grupos 1 y 2, logrando reconstruir la pirámide más grande, que, además de ser una pirámide doble, tiene una altura de 27 metros sostenidos en una plataforma de 50 por 70 metros de base. En octubre de 2009 la zona arqueológica de Moral-Reforma fue abierta al público.
En Moral-Reforma se han encontrado hasta ahora cuatro altares, seis estelas y más de 50 piezas arqueológicas que se exponen en el Museo “Dr. José Gómez Panaco” de Balancán de Domínguez y el Museo Regional de Antropología Carlos Pellicer Cámara de Villahermosa.
Descubrimiento
La primer referencia de Moral Reforma fue hecha por el arqueólogo ítalo-autriaco-alemán-mexicano Teobert Maler en 1907, cuando al realizar una expedición que lo lleva de Tenosique de Pino Suárez a la parte central del río Usumacinta. Durante su recorrido, escucha relatos de los lugareños que señalan la presencia de grandes montículos de tierra en el sitio, y lo consigna en sus notas con el nombre de “La Reforma II”.